domingo, 3 de febrero de 2013

ESPOLÓN DE CALCANEO


Con frecuencia acuden pacientes a nuestras consultas refiriendo dolor en la zona del talón, a veces irradiado a la planta, que en  muchas ocasiones llega a ser invalidante y no permite que puedan realizar sus actividades normales del día a día.
En la mayoría de los casos vienen con la idea preestablecida de que el dolor es debido al "pincho" que se ve en la radiografía y que su tratamiento deben ser taloneras especiales con un pequeño orificio de descarga.
Pues bien, en esta entrada vamos a intentar dar un poco de luz sobre esto del ESPOLÓN y de los diversos tratamientos disponibles para la resolución de este pequeño gran problema.

DEFINICIÓN DE ESPOLÓN

Un espolón es una prominencia ósea que sale de la zona plantar del talón secundaria a una fascitis plantar en la mayoría de los casos.
Pero ¿qué es una fascitis?
La fascia  plantar es una banda de tejido resistente presente en la planta del pie, de forma triangular, cuyo vértice se inicia en el talón y se ensancha hacia adelante hasta terminar en las cabezas de los metatarsianos. 
Su  función es mantener la curvatura longitudinal de la bóveda plantar y amortiguar las fuerzas que se ejercen sobre la misma al mismo tiempo que tiene un papel fundamental en el desarrollo del paso a la hora de caminar.
Cuando hay una tensión continuada de la fascia, se genera un proceso inflamatorio que si no es tratado convenientemente va a originar una serie de procesos degenerativos en el origen de la fascia plantar que serán los responsables de la osificación de la fascia y de la formación del espolón de calcáneo. 
Por todo esto hay que tener en cuenta que el espolón es un fenómeno secundario de la Fascitis Plantar y no el origen del dolor. En el 50% de la población que presenta espolón de calcáneo no refiere dolor alguno.

CAUSAS DE LA FASCITIS PLANTAR

 La causa más común de Fascitis Plantar se relaciona con alteraciones mecánicas del pie, aquellas personas que tengan problemas con los arcos de los pies, ya sean pies planos o con un  arco demasiado pronunciado tendrán una mayor probabilidad de desarrollar una fascitis plantar.
También hay que tener en cuenta que la edad va a influir en la elasticidad de la fascia, por lo que los años van a ser también un factor importante.
El uso de un calzado con poca amortiguación, personas con sobrepeso,  movimientos bruscos y repetitivos,  atletas, en especial los que realizan footing, los corredores y los saltadores.

SÍNTOMAS

La queja más común es el dolor y la rigidez en la parte inferior del talón. El dolor puede ser puntual en la zona del talón o irradiarse por toda la planta del pie.
El dolor generalmente es más severo en la mañana cuando se da los primeros pasos, después de pararse o sentarse por un rato, al subir escaleras, después de actividad intensa.
El dolor se puede desarrollar de manera lenta con el tiempo o repentinamente después de una actividad intensa.

TRATAMIENTO

En esta entrada no pretendo dar el tratamiento ideal, sino el proceder lógico de los profesionales ante esta patología.
Si que puedo dar un consejo en esos primeros momentos de dolor , es el  reposo utilizando el dolor como guía y masajear la zona con frio llenando una pequeña botella de plástico con agua y congelarla, haciendo rodar  el talón y el arco del pie sobre la botella.
Esto no debe evitar que acudamos al podólogo para que nos haga una valoración exhaustiva del pie para confirmar la fascitis plantar.
En este caso y suponiendo que estemos en una fase aguda el problema se debería solucionar con terapia anti-inflamatoria y fisioterapéutica.
En el caso que en un tiempo prudencial este tratamiento no funcionase, el podólogo realizará un estudio biomecánico para confirmar el origen de las molestias y en su caso realizar las correcciones oportunas con ortesis plantares personalizadas para cada paciente  según cual sea el origen de la fascitis plantar ( pie Plano, pie Cavo, etc. ), de manera que evitemos la tracción de la fascia plantar y por tanto su relajación y desinflamación.
En casi un 90% de los casos en este nivel resuelven el problema.
Solo en el caso de que tras un año de tratamiento no se resuelva podríamos hablar de terapia con corticoides a modo de infiltración, sin dejar el tratamiento ortésico. La cirugía rara vez está indicada, sin embargo, si todos los tratamientos anteriores han fracasado, una liberación quirúrgica parcial de la fascia plantar puede estar indicada.

CONCLUSIÓN

Ante un dolor en la planta del pie no dudéis en acudir a vuestro podólogo, no os dejéis aconsejar por amistades y conocidos sobre tratamientos, y tener en cuenta que la base de una buena solución siempre pasa por el reposo y seguir las indicaciones del profesional.
Solo espero que este articulo os sirva y os saque de dudas sobre el famoso espolón. Que un buen estudio biomecánico en nuestras instalaciones ayudarán a prevenir este tipo de patologías sobretodo si os dedicáis al deporte o tenéis un trabajo de muchas horas de pie.  

 

domingo, 13 de enero de 2013

HIDRATACIÓN DEL PIE

En el día a día de la consulta aconsejaré a mis pacientes una buena hidratación de los pies  en más de un 90% de los casos. Y no lo hago por una cuestión estética sino como prevención y cuidado de la piel. Por lo que espero que el tema de hoy sirva tanto a pacientes como no pacientes.


La piel es el mayor órgano de nuestro cuerpo y del que hay que destacar su función de barrera protectora contra las agresiones externas e incluso internas siendo por ejemplo estas funciones
barreras antimicrobiana, protección frente a las radiaciones de los rayos UV, mantener la temperatura corporal en equilibrio, etc.


La piel está cubierta por un manto hidrolipídico, que la protege y hace de barrera, compuesto por desechos de células epidérmicas , es la secreción sebácea, sudoración,  cosméticos y la polución, consiguiendo con este conjunto de desechos una barrera antibacteriana fisiológica del organismo, gracias a  que modifican el pH, lo cual implica un factor adverso para el crecimiento de gran cantidad de bacterias patógenas. Además, esta modificación del pH ayuda a la retención de agua a nivel del estrato córneo. La disminución de esta barrera o su desaparición hace que la piel pierda agua del estrato córneo y aparezca un aspecto seco, agrietado, picor, escozor, no tiene brillo y pérdida de elasticidad.
Una menor retención de agua implica un mayor contacto con el exterior, y, por consiguiente, una mayor tendencia a la descamación. Esta descamación, en pacientes sanos, no supone ningún problema, y no debe preocuparnos excesivamente. Pero en pacientes de la tercera edad o con problemas en la piel por ejemplo ulceras es importante mantener una buena hidratación del tejido circundante, y por tanto, nos es útil conocer qué defensa natural presenta la zona afectada.
 Si este manto desaparece de forma excesiva (ya no solo el agua, aunque todo está relacionado), la epidermis queda desprotegida y los factores externos actúan de manera más agresiva.
Tenemos que tener en cuenta, pues, que la hidratación no es solo un criterio estético, sino un tema de salud a tener en cuenta, sobretodo a nivel de zonas alteradas.Cuando intentamos dar un tratamiento para solucionar una alteración  no intentamos hidratar la piel, como comúnmente se cree, sino que intentamos que la misma piel no se deshidrate. Por ello intentamos reestablecer el manto hidrolipídico de modo que la piel misma pueda recuperar su estado hídrico normal.
La función de los productos hidratantes es la de retener agua en la superficie cutánea, para conseguir un restablecimiento del equilibrio de la piel y su función barrera, consiguiendo mayor suavidad, elasticidad y flexibilidad y con todo ello indirectamente conseguimos una prevención ante el envejecimiento.
Espero que el tema os halla gustado y si tenéis alguna duda no dudéis en preguntar por los canales habituales.